Es cierto que los sellos de correos, con el incremento de las telecomunicaciones digitales y electrónicas instantáneas, han sufrido un duro revés en cuanto a su difusión se refiere, quedando prácticamente relegados a un recurso del coleccionismo filatélico. No obstante, no se puede cuestionar la aportación a la historia cultural de los diferentes países del sello postal, poniendo en valor patrimonio, recursos naturales, efemérides y un sin fin de aspectos. En estos días, el uso del correo postal físico conserva una esencia incluso romántica, la de, por ejemplo, un sobre tangible que cruza medio mundo para llegar a su receptor unos días después, quizá con un mensaje escrito de puño y letra que puede palparse con las manos, y que además porta un sello con una temática del país de origen y que, en muchas ocasiones, lleva el nombre de Soria y su provincia a los lugares más recónditos.
Después del primer tomo, continuamos el 3 de octubre de 1980, con la serie dedicada a la Exposición Filatélica de América y Europa ESPAMER'80. Cuatro ejemplares entre los que destacamos un sello de 25 pesetas dedicado a la Puerta del Sol de Tiahuanaco (Bolivia) y al arco romano de Medinaceli del que se imprimieron algo menos de 5 millones de ejemplares. El motivo fue tan acertado, que en 2013 el arco de Medinaceli volvió a ser protagonista de una nueva tirada.
Lamentablemente, tras esta emisión del 80, como en otras tantas cosas, Correos se olvidó de Soria, o al menos, consideró oportuno una sequía de dos décadas sin un guiño claro, más allá de temas generales como un sello dedicado a la dulzaina o la publicación de un sello dedicado al nícalo y otras especies micológicas que bien podrían haberse tomado de imágenes de la provincia de Soria. Pero el bagaje, es sin duda, escaso. Así que si Correos no hacía por fijarse en Soria, ya se encargarían los sorianos de hacer algo para remediarlo. Así, el 27 de octubre de 1994, Correos publica una hoja bloque en la que se conmemora el centenario del COI, publicando los deportes en los que España había logrado medalla de oro en Barcelona 92. Dicha hoja bloque, que no el sello en concreto, recoge el nombre de todos los ganadores y, cómo no, aparece Fermín Cacho Ruiz como campeón de la prueba de 1.500 metros lisos.
En 1996 aparece, en este caso sí en el sello, una persona muy vinculada a Soria aunque, eso sí, pamplonica de nacimiento. Jaime de Marichalar aparece acompañando a la familia Real en sus vacaciones. Para muchos el año 96 está a la vuelta de la esquina, pero a tenor de los últimos años, no se puede obviar de que han pasado muchas cosas desde entonces y muchos año...
Llegamos al 13 de junio de 1997 para contemplar otra imponente hoja bloque dedicada a Soria. Y sí, volvemos una vez más al Burgo de Osma, aunque compartiendo protagonismo con Ágreda y Berlanga de Duero. 2,5 millones de sellos recordarán para siempre la celebración de Las Edades del Hombre en El Burgo, sexta edición de la muestra, titulada 'La ciudad de los seis pisos' y que estuvo abierta entre mayo y noviembre de dicho año.
Y llegamos al año 2000, sellos con los que cerramos este segundo capítulo. Empezamos por un sello emitido el 23 de junio de 2000, con motivo de una serie que llevaba muchos años recordando las fiestas populares de España y que recogía el Paso del Fuego de San Pedro Manrique. 35 pesetas, y una tirada de 1,5 millones de sellos.
Continuamos con la serie Correspondencia Epistolar Escolar, que repasaba a modo comic la historia de España y en la que Numancia, no podía faltar con un guiño futbolero a la actualidad de aquel momento. Se trata del último sello soriano en pesetas, 20 en este caso y una tirada de 2 millones emitida el 22 de septiembre.
