Para conciliar el sueño, el pastor cuenta ovejitas. Las ve saltar, una a una, por encima del vallado. A la mañana siguiente, encuentra el establo vacío.
Ilustración: Lola Gómez Redondo
8 pensamientos sobre “Pesadilla”
¿Un pastor que para poder dormir cuenta ovejas? A eso se le llama no desconectar del trabajo.
¿Un pastor que para poder dormir cuenta ovejas? A eso se le llama no desconectar del trabajo.
Las preocupaciones no son solo patrimonio del urbanita.
Imagino que las ovejitas no tendrán problemas de insomnio pues caerán rendidas con tanto saltito nocturno.
No hay nada como el ejercicio.
Un sueño premonitorio. 🙂
Abrazo!
Sí pero como no vuelvan las ovejas a ver que cuenta nuestro pastor para que le venza el sueño.
Si es que no se puede uno dejar llevar por los sueños de cama…
A veces es lo único que tenemos.