Cualquiera que haya leído unas normas de cualquier tipo anteriores a los años 70 podrá darse cuenta de lo trasnochadas que ahora quedan la mayoría. La sociedad en general ha experimentado unos cambios que hoy conforman una realidad muy distinta a la habida entonces.
El día a día, la libertad conseguida en algunos aspectos, nuestro batallar y el de nuestros mayores por un mundo más justo ha propiciado un cambio en el convivir diario.
Unas pinceladas de nuestra Constitución y de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
“Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social”.
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros”.
Jurados de Cuadrilla sí. Dos seres humanos.