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Desde lo alto

Tiene un minuto. Desde lo Alto. Foto de Javier de Julián
photo_camera Tiene un minuto. Desde lo Alto. Foto de Javier de Julián

El niño abre la ventana y se encarama al alféizar. Un río incesante de coches se extiende a sus pies. En su mente retumban todas las burlas y mofas que le dedican a diario sus compañeros de colegio. Desea con todas sus fuerzas que cesen de una vez. Pero no lo hacen. Cierra los ojos, y sin cuenta de tres, se precipita al vacío. Cuando los abre, se descubre arrodillado en la acera. No tiene un solo rasguño. Desconcertado, eleva la vista hacia la ventana abierta de su habitación. Observando en derredor, cruza su mirada con la de un anciano mendigo. Éste, bajo su frondosa barba, parece dedicarle una suerte de sonrisa antes de desaparecer engullido por el trajín de la calle.