Las calles de Soria cuentan con un nuevo mural artístico, en este caso, vinculado a la memoria histórica y que ha sido impulsado por la Asociación Recuerdo y Dignidad junto al Ayuntamiento de Soria, realizando el encargo de la obra a 'La Casa de la Juana' con sede en el Casino Amistad Numancia. El mural se ha ubicado en un emplazamiento de gran visibilidad, junto a la glorieta Odón Alonso en la parte superior del muro del campo de hierba artificial del polideportivo San Andrés, lo que además de hacerla visible, dificulta que pueda ser deteriorada.
El concejal Eder García Ortega, ha recordado la labor de la asociación y que el Consistorio y la misma cuentan con un convenio de 20.000 euros anuales por dos años, que contribuyen a las acciones de Recuerdo y Dignidad, que contempla la creación, próximamente de un nuevo memorial.
Desde Recuerdo y Dignidad, Blanca Villar Mateo, destaca que el convenio incluye también las Jornadas de la Memoria Histórica, excavaciones buscando a personas asesinadas, memoriales, una mesa sobre simbología franquista, o intervenciones artísticas como esta. Ana Andaluz Caballero, también de la Asociación, añade la importancia de esta acción para el "respeto por la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición", y añade que hay que conocer el pasado, reparar en el presente, para garantía de futuro de que no se repitan estos hechos.
En cuanto a los detalles del mural, han sido explicados por la artista Miriam Tello, en representación de 'La Casa de la Juana', taller artístico soriano. Tello ha explicado que se ha tratado de hacer una representación simbólica, por lo que una placa explica el mural. "La primera imagen está sacada de una fotografía de la familia Gaya Tovar, padres de Gaya Nuño, que representa a cualquier familia que sufrió la guerra civil. La siguiente escena plasma el exilio con una mujer, pues tenían muchas problemáticas, la siguiente es una mesa donde se han colocado objetos que se suelen encontrar en las exhumaciones. Un objeto no suele encontrarse, como es el sombrero que es un guiño a Machado y a Lorenzo Soler, cineasta que ha colaborado con la memoria histórica. Por último, aparece una maleta, que podría ser la de Machado o la de cualquier familia que llegaban de campos de concentración. Tiene sentido de esperanza, por lo que contiene un libro y una rosa", finaliza.