Soria contará a partir de esta semana con su propia hoja de ruta contra el Cambio Climático con la mirada puesta en 2030. El objetivo es reducir un 65% la emisión de gases de efecto invernadero y acercar al municipio a la neutralidad de emisiones. El equipo de Gobierno llevará al pleno municipal de este jueves un documento que contaría con el consenso político y de la sociedad soriana, ya que han participado hasta 23 organizaciones en su elaboración. Precisamente este aspecto ha sido reivindicado tanto por el alcalde de la ciudad, Carlos Martínez, como por el director de Cesefor, Pablo Sabín, cuya entidad ha tenido un papel clave en el proyecto desde el punto de vista científico.
Martínez ha explicado que este documento, gracias a su consenso, permite fijar el camino a seguir independientemente de los próximos Gobiernos de la ciudad, fijando una "hoja de ruta clara" con especialistas del sector y 23 colectivos de la ciudad, que recoge iniciativas para los próximos años de cara a reducir el impacto que provoca la ciudad en el medio ambiente y sus consecuencias en el cambio climático. En una comparecencia pública, ni Martínez ni Sabín han precisado ninguna de estas medidas a tomar ya que se presentarán el jueves ante los propios colectivos que han participado en la elaboración del proyecto.
En su elaboración, se ha tenido en cuenta el punto de partida de la situación medioambiental de la ciudad, para establecer dónde será necesario centrar los principales esfuerzos y medidas. Consta de cinco principios transversales, como son las aspiraciones generales de justicia climática, de gobernanza participativa, de innovación como 'smartcity', de proyecto colaborativo multinivel y la bioeconomía. Además, es preciso trabajar sobre el entorno ya construido, con actuaciones concretas como la rehabilitación de viviendas, la movilidad y el transporte, la producción y el consumo responsable como la concienciación de la ciudadanía de los hábitos de consumo, la transición energética, la gestión de los residuos o la transversalidad y participación de las medidas políticas municipales.
El alcalde ha explicado que el Ayuntamiento ya había abrazado los objetivos de la Agenda 2030 y que ya se estaban llevando a cabo medidas en este sentido, por lo que considera que no se parte de cero. No obstante, cree que este documento es importante de cara a entrar en un selecto club de 100 ciudades europeas con un fuerte compromiso medioambiental. Además, considera que este plan permite mejorar la baremación de los proyectos de la ciudad de cara a obtener fondos europeos.
Por su parte, Pablo Sabín ha querido agradecer al alcalde que contara con Cesefor para ir de la mano en este proyecto. "Ha sido un año duro" de trabajo y reuniones online con los diferentes colectivos para establecer medidas consensuadas que ha sido "impulsada por el Ayuntamiento" pero desarrollado "por las organizaciones participantes", entre los que se encuentran asociaciones empresariales, asociaciones ciudadanas o partidos políticos con una "inmensa representatividad". Sabín ha reconocido que se ha visto sorprendido "por la apertura, colaboración y el grado de consenso" alcanzado para una "oportunidad estratégica".
La propuesta suscrita prevé reducir en un 65 por ciento las emisiones de gases de efecto invernadero de la ciudad, de las 350.000 toneladas que se emiten cada año. En estas cifras, juega a favor de Soria que la masa forestal del término municipal absorbe 80.000 toneladas, por lo que se trabaja para reducir en 155.000 las toneladas emitidas y acercarse a la neutralidad de emisiones. Todo ello, advierte Sabín, con las premisas de mantener la prosperidad de la ciudad en todos los ámbitos. Sobre los aspectos más contaminantes, Sabín ha apuntado que el 68 % de las emisiones se debe al consumo de energía de edificios industriales y residenciales. El 24% corresponde a las emisiones del transporte y el 6% a la gestión de los residuos urbanos y de la depuradora.
