Huerta solo piensa en el Oviedo B: "Ni quiero mirar atrás ni adelante"

El técnico espera que el apoyo de Los Pajaritos ayude a salir de una situación difícil de la que está seguro "saldremos más fuertes"

El CD Numancia juega mañana a las 16.30 horas en Los Pajaritos ante el Real Oviedo B. "Es un partido definitivo para nuestros intereses y solo nos vale ganar, engancharnos y apurar opciones", explicaba el técnico, Álex Huerta, al inicio de su comparecencia previa al duelo. Para ello cree que su equipo está cada vez "más cerca" de ser "el equipo competitivo que queremos ser", añadía.

El técnico soriano y su equipo solo piensan en el duelo de mañana "desde que acabó el partido" del fin de semana, ya que quieren "dar una alegría a nuestra afición". El preparador, que siempre se muestra crítico en su análisis, asume que les ha faltado "frescura", pero afirma que en Villaviciosa no vio ningún bajón con aspectos que les hace estar "más cerca de lo que queremos". El equipo ha pasado problemas a causa del brote del COVID-19 que se unen a otros que vienen de lejos y en los que el soriano sigue trabajando, como el acabar con "la ansiedad en el área" que se traduce en escasez de gol, para lo que quiere subir la "intensidad". A ello puede ayudar el aumento de horas de descanso durante la semana para llegar a este encuentro, de hecho reconoce que "llegamos más preparados", con toda la plantilla a excepción de Corral, con cinco amarillas.

El preparador está tan centrado en el choque de mañana que sentencia: "No quiero mirar atrás ni adelante, en eso ponemos el empeño". No obstante, aclara que su plantel siempre es ambicioso, por lo que mantiene los objetivos. "El fútbol cambia mucho de una semana a otra", apunta, así, el pasar la barrera de 20 puntos, ponerse a dos del Valladolid B con puntos en juego, cambiaría la perspectiva. "No estamos lejos de ganar y esta situación nos va a hacer salir más fuertes. Todavía se puede llegar", manifestaba.

Se habla siempre, en este tipo de situaciones límite, de ganar y ganar, pero el técnico es claro: "Nuestros esfuerzos están en cómo ganar, por decir queremos ganar no se gana. Queremos dar una alegría a la afición y les necesitamos, 95 minutos de apoyo, y cuando salgamos del partido que se nos juzgue por lo que vea en el campo", decía en referencia a la necesidad de que los suyos sientan que juegan en casa.

Quizá ese apoyo permita ver más alma, empujón y chispa, que en otros duelos, en los que pudo pasar factura la compleja situación en la que se vieron inmersos los numantinos.

Cuestionado sobre Lillo o sobre la escasez de goles de los delanteros, el técnico no ha querido personalizar en ningún caso, pero además, sabe que añadir presión a los hombres de arriba no va a facilitar las cosas. "No quiero que se centre el acierto en los delanteros, porque ellos están responsabilizados, queremos quitarles presión para que no lleguen incómodos al área. No les cambiaría por nade, sé que viven de rachas y no están encontrando gol, pero estoy tranquilo, me transmiten seguridad y cuando vuelvan a encontrar el gol, va a serlo de forma definitiva, pero no quiero que tengan más responsabilidad que el resto del equipo", aclaraba.

 

El preparador numantino ha indicado que su rival, el Oviedo B, es un equipo ·incómodo, con desparpajo y ritmo". Huerta considera que ha tenido una segunda vuelta complicada pero dos victorias recienten le dejan en situación más cómoda. "Ha habido cambios importantes en el mercado de invierno. Alterna jugadores jóvenes con un par de jugadores que les da más madurez. Tienen un delantero dinámico... Es un buen equipo", apuntaba. 

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