La Torca de Fuencaliente es uno de los lugares más epatantes (que causa asombro, admiración) de la provincia de Soria. Y lo es por dos razones. En primer lugar, por sus propias características. No es secreto que en toda esta zona de influencia del Cañón del Río Lobos hay cientos de cuevas y simas, pero esta situada en las cercanías de Fuencaliente del Burgo sorprende por su anchura y por su gran profundidad, estimada en más de 80 metros.
La segunda razón que causa asombro es la ausencia total de señalización y de vallas que eviten posibles percances, algo que no sucede en otras simas menos conocidas de la zona. Su potencial de atracción de visitantes es importante.
A la Torca se llega por un camino que sale de Fuencaliente y que atraviesa una cantera. Con todoterreno se puede llegar hasta el gran agujero, pero con turismo es preferible aparcar y andar diez minutos por un quebrado paisaje que va anunciando el gran espectáculo que aparece después.
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