El Gobierno repara un muro de mampostería, cerca de San Saturio, dañado por las tormentas de abril

Las obras, respetuosas con el entorno ambiental y patrimonial, se prolongarán durante unos cuatro meses y costarán cerca de 475.000 euros

El Gobierno de España ha iniciado las obras de reparación de un tramo del muro de mampostería, de la calzada y de la acera de la carretera N-234 próximos al aparcamiento desde el que se accede a la ermita de San Saturio. El coste de esta actuación ronda los 475.000 euros.

Esta reparación se ha hecho necesaria puesto que este muro, destinado a la contención de la margen izquierda de la carretera a la altura del kilómetro 348+814, colapsó como consecuencia de los episodios de fuertes tormentas ocurridos entre el 6 y el 21 del pasado mes de abril. El consiguiente derrame de las tierras dejó parte de la acera descalzada y provocó grietas a lo largo de ésta.

El pasado 8 de octubre, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana declaró la emergencia de esta reparación del carril izquierdo y de la acera a lo largo de unos 60 metros para subsanar la situación de peligro que generaban estos daños.

Teniendo en cuenta las características del área afectada por el colapso del muro existente y su encuadre dentro de una zona protegida desde los puntos de vista cultural y ambiental, se ha optado por reponer el muro derrumbado por otro prefabricado de hormigón armado con una terminación que se integre en el paisaje. Después se repararán la acera y calzada afectadas.

Todo ello, después de elevar consulta a la sección de Patrimonio de la Junta de Castilla y León.

 

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En cuanto al talud, en la margen derecha de la carretera, en la zona de la curva y frente al aparcamiento de acceso a la ermita de San Saturio y al monumento histórico de San Polo, en el que se ha observado el derrame sobre la acera, se ha propuesto estabilizar el mismo con una protección de un manto de escollera de 400 – 800 kg con un espesor de un metro a lo largo de 20 metros de longitud.

Para la ejecución de estas actuaciones se reducirán los carriles de circulación, puesto que se dará paso alternativo, para disponer de mayor seguridad durante unas obras que se prolongarán en torno a cuatro meses.

El acceso a la zona del derrumbe y, por lo tanto, a la zona de las obras, se realiza por una senda peatonal que no permite el paso de maquinaria. Por este motivo, la maquinaria necesaria para la ejecución de las obras en la zona de la ribera del río deberá bajarse desde la carretera mediante el uso de grúas automóviles, al igual que la entrada de los materiales a la zona de obra y la salida de los sobrantes desde la zona de trabajo.