Con motivo del coronavirus y del parón de todas las competiciones de fútbol, algunas han regresado al completo (Primera y Segunda), otras solo para jugar fases de ascenso (Segunda B y Tercera) y otras no volvieron a jugar más, las de menor categoría.
La Real Federación Española de Fútbol decidió que solo hubiera descensos de Primera a Segunda y de Segunda a Segunda B y que, sin embargo, se mantuvieran los ascensos en todas las demás categorías.
Ello implica, pues, que ningún equipo de Segunda B desciende a Tercera. Cuatro escuadras sí subirán a Segunda, de la que bajarán cuatro. A ellas se sumarán 20 equipos procedentes de la Tercera división.
Por tanto, el año que viene 2020-2021 habrá 100 equipos en vez de los 80 actuales, y estarán distribuidos en cinco grupos y no en cuatro.
La intención de la RFEF es que esta situación sea transitoria y todavía más peligrosa para regresar a Segunda, ya que se pretende que el año haya una categoría nueva profesional entre Segunda y Segunda B que estaría conformada por 40 equipos.
Es decir, el año que viene bajarían de Segunda B a una categoría nueva pero que se llamaría seguramente igual 60 equipos. En ese ejercicio 2021-2020 habría una Liga Pro de dos grupos de 20, que serviría de escala entre la Segunda B y la Segunda, aunque todo ello está todavía por concretar.