Blog | Por Sergio Tierno / Viajes, geografía, deportes y curiosidades

14-2-2020. El pueblo mejor camuflado de Soria: Castillejo de San Pedro

-Allí está, ¿lo ves?

-No.

-Justo allí, hacia donde estás mirando...

-Ya, ya, pero no lo veo.

-¿Sinceramente no lo ves?

-Te lo juro... ¡Ah sí sí, para, ahora lo veo. Si es que no se distingue!

Esta conversación seguro que se ha producido más de varias veces entre personas que se dirigen desde Fuentes de Magaña hacia Las Fuesas y Castillejo de San Pedro.

Este último es el pueblo mejor camuflado de Soria, o al menos ocupa un lugar muy alto en esta hipotética lista.

Desde Fuentes de Magaña sale una carretera en dirección a Valdeprado. Muy poco después, un desvío a la izquierda, todavía asfaltado, baja profundamente hacia Las Fuesas.

Es en este trayecto de bajada cuando se ve (o no) sobre una pequeña colina, el pueblo de Castillejo de San Pedro, cuya historia no se diferencia de la de algunos otros de Soria: en su día se vio abandonado y, en algún momento de las últimas décadas, parte de sus casas fueron arregladas por sus propietarios, de tal manera que su abandono está muy lejos de ser total, algo que no era fácil adivinar hace 25 años.

Junto a esas edificaciones arregladas, hay un curioso mirador sobre uno de los dos valles que flanquean la localidad, un rincón de meditación, algunas esculturas, almendros sorprendemente en flor para ser 12 de febrero (estuvimos antes de ayer)...

Los muros de las casas están hechos con las mismas piedras de las montañas y, como no todas conservan la techumbre, el pueblo se adapta al entorno con total naturalidad. Además, el color de las tejas tampoco es tan llamativo respecto a los alrededores.

Cuando conocí Castillejo era mejor no intentar llegar a él en coche. Me suena que había un cartel que ponía "600 metros" y allí empezaba un camino de tierra con muchos baches que salvaba el desnivel para llegar al núcleo. Ahora, ese camino está asfaltado y no es difícil dar la vuelta en la plaza.

Pero si aparcáis en Las Fuesas y os dais un paseo sin prisa, tampoco sería una mala forma de proceder.