Jesús Molina: desde los 14 años en la droguería familiar, tanto en Almazán como en Soria

A los 16 años se tuvo que quedar al frente del negocio al caer su padre enfermo
Especial 120 años de la Cámara

Jesús Molina comenzó en la tienda que regentaba su padre en Almazán cuando tenía 14 años.

Al poco tiempo, cuando cumple 16 años, su padre cae enfermo y tiene que hacerse cargo de la droguería. Desde entonces hasta hoy se ha mantenido al pie del cañón en la tienda, ampliando negocios en Soria capital y en la propia villa adnamantina.

La Droguería Molina fue una de las pioneras en cuanto al abastecimiento de pinturas y durante muchos años también sirvió barnices para la industria del mueble en toda la provincia, así como, embalajes.

Con la decadencia del sector del mueble, la Droguería Molina siguió especializándose en pinturas, sumando maquinaria para convertirse en una referencia. Jesús asegura que la suya ha sido una trayectoria empresarial dura, pero muy bonita y lamenta que el negocio tenga difícil continuación hoy en día en Almazán.

Recibirá un premio por su larga trayectoria empresarial en la Gala del 120 aniversario de la Cámara de Comercio, el jueves 14 de noviembre a las 18.45 en el Palacio de la Audiencia

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