El sábado 5 de octubre a las 23.59 se dará la salida a la prueba masculina de maratón del Campeonato del Mundo de Atletismo que se celebra en Doha (Qatar). En esa línea de salida estará el soriano Daniel Mateo Angulo, gracias a su gran debut en la distancia en el Maratón de Rotterdam del pasado 7 de abril (2h10:53, mínima mundialista y mínima para los Juegos de Tokio en 2020).
Desde entonces, hace ya casi cinco meses, el día a día del adnamantino (31-8-1989) se resume fundamentalmente en entrenar y entrenar, algo diferente a lo que sucedió en su preparación para la ciudad holandesa, ya que en las semanas previas hizo algunas carreras de cross. Después de Rotterdam, la idea inicial que compartía con su entrenador, Enrique Pascual Oliva, era la de competir en la Copa de Europa de 10.000 en Londres del 6 de julio. Sin embargo, no les gustaron las sensaciones con las que regresaron de su concentración en Doha (10-16 de junio), así que decidieron cambiar el plan para llegar de la mejor posible al comienzo de las 12 semanas de preparación específica para el maratón, a mediados de julio.
Dentro de esa preparación, Angulo se volverá a poner un dorsal este domingo 8 de septiembre en la media maratón más importante del mundo, la Great Run North de Newcastle (desde las 11.40 horas en España). Allí han ganado la gran mayoría de los grandes: Rosa Mota, Grete Waitz, Ingrid Kristiansen, Sonia O'Sullivan, Paula Radcliffe, Gete Wami, Derartu Tulu, Berhane Adere, Mary Keitany, Vivian Cheruiyot... y, entre los hombres, Carlos Lopes, Steve Moneghetti, Hendrick Ramaala, Josia Thugwane, Moses Tanui, Paul Tergat, Zersenay Tadesse, Haile Gebrselassei, Kenenisa Bekele o Mo Farah.
Este último, de hecho, lleva una racha de cinco victorias consecutivas y este domingo buscará la sexta. Otros atletas destacados que compartirán carrera con Mateo son Callum Hawkings, Tamarit Tola o Bashir Abdi, con lo que un año más se volará en el buen circuito de esta localidad.
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El soriano tiene la intención en Newcastle de "estimular al cuerpo un poco", de comprobar sobre el asfalto las buenas sensaciones que está teniendo en los entrenamientos y, si es posible, intentar batir el récord de Soria en posesión de Abel Antón, que tiene 1h03:11 en Barcelona desde el año 2000, lejos de sus capacidades verdaderas. Daniel Mateo solo ha corrido en modo de competición una media, este mismo año también en Barcelona, cuando hizo 1h03:52.
A esa cita llegó muy lejos del estado de forma en el que se encuentra actualmente, con lo que piensa que puede rebajar ese mejor tiempo suyo. Más allá de ese carácter simbólico y anecdótico de arrebatarle un récord a Antón, lo que de verdad quiere Mateo es confirmar con cronómetro y jueces que la preparación marcha por el buen camino.
21 días de descanso y tres concentraciones
Desde el citado 7 de abril en Rotterdam, y una vez logrado ese objetivo mundialista y olímpico, el fondista de Almazán se tomó tres semanas de descanso activo, 21 días de los cuales corrió 15 y alguno más cogió la bicicleta a buen ritmo.
A partir de entonces, empezó a enfocarse en el tartán hasta que, como se ha comentado, decidió abandonarlo al regreso de su primera estancia en Doha a mediados de junio.
Esa de Doha fue la primera de las tres pequeñas concentraciones a las que va a acudir durante todos estos meses, concentraciones que ayudan a combatir la rutina y la falta de competiciones, así como a buscar sensaciones similares a las que encontrará en el Mundial.
La segunda concentración fue en Lanzarote del 7 al 14 de agosto, un lugar en el que ya sabían que dispondrían de lugares para rodar, pista, gimnasio para hacer pesas... Tampoco les faltó el calor y la humedad, aunque lo de Doha será 'un paso más'.
La tercera de esas tres ausencias un poco más largas de Soria comenzará el mismo domingo cuando regrese de Newcastle. De la ciudad inglesa viajará directamente a Barcelona y desde allí a Amposta (Tarragona), donde permanecerá otra semana.
Dentro de los procesos de aclimatación a las condiciones que se va a encontrar en la capital qatarí, el maratoniano ha estado también dos veces en las instalaciones del Ejército del Aire en Madrid, gracias a la mediación de la Real Federación Española de Atletismo. Allí ha probado una máquina climática en la que es posible instalar las condiciones de temperatura y humedad que se deseen, para simular cualquier ambiente. Reconoce Mateo que el primer día no pudo realizar la sesión completa, dada la dureza de dichas condiciones.
Siempre dentro de ese proceso de adaptación, sus entrenamientos en Soria cuando regresen a Amposta serán por la noche en Los Pajaritos, a un horario en el que normalmente las instalaciones estarían cerradas. En ese sentido, el corredor muestra su agradecimiento al Ayuntamiento de la ciudad por las facilidades que le está ofreciendo, facilidades entre las que se incluye entrenar en una pista junto a la piscina cubierta para seguir aclimatándose a la humedad.
A falta de poco más de un mes para su debut como mundialista (cross aparte), Mateo ya ha comenzado la recta final de su preparación específica. La semana pasada, la séptima de las 12, fue la más dura, culminada con una tirada de 35 kilómetros que le dejó más cansado de piernas que de pulmones.
A partir de ahora, y siempre bajo la batuta de Pascual Oliva ("no deja que se le escape nada"), se trabajará más la intensidad que el volumen, aunque para trabajar esa intensidad es necesario haber hecho muchas horas antes de carrera continua a grandes ritmos. Desde que se pasó definitivamente al maratón, además de esa ampliación lógica del número de kilómetros, el gran cambio son los entrenamientos en asfalto: "Las series las hago todas en asfalto, lo mismo que los rodajes largos de los domingos".
Le toca desde ya, por tanto, afinar pensando en Doha. ¿Y qué sucederá allí el 5 de octubre? A falta de conocer número, nombre y marcas de los inscritos para ese día, Daniel Mateo no se pone todavía objetivo de puestos sino el "de correr al ritmo para el que estamos entrenando". Desde el pistoletazo de salida y durante 42 kilómetros, el soriano no se dejará nada con el fin de que se debut sea el mejor posible.
