El Burgo de Osma se engalana de alfombras florales en un bonito día de Corpus Christi

Cerca de 400 voluntarios han trabajado para preparar estas increíbles alfombras florales
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El Burgo de Osma ha celebrado este domingo una de las jornadas de más esplendor y belleza con el Corpus Christi y las preciosas y trabajadas alfombras florales que han decorado el centro de la villa. El acto central del día del Corpus Christi ha sido la procesión con la custodia del Santísimo Sacramento, que discurre desde la Catedral, recorriendo a partir de su salida por la puerta de San Miguel, la plaza de San Pedro de Osma, la plaza de la Catedral, la calle Mayor y la plaza Mayor, girando ante el edificio consistorial, para volver por el mismo itinerario a la plaza de la Catedral. Los niños que el pasado fin de semana recibieron la Primera Comunión, han acompañado a la procesión lanzando pétalos.

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Allí, ante la puerta meridional del templo catedralicio, ha terminado la procesión con la bendición del obispo de la diócesis portando la custodia. Los más pequeños, tras el paso de la procesión, han iniciado su particular 'guerra' lanzándose los colorines de las alfombras florales una vez que, eso sí, ya estaba permitido pisarlas.

En el recorrido de la procesión, la carroza con el Santísimo va pisando las vistosas alfombras florales que la creatividad y el esfuerzo de casi 400 voluntarios ha hecho posible.

El trabajo de preparación de las alfombras comienza semanas antes de la fiesta con el acopio de material, cubicación, selección, teñido y elección de los motivos. Durante la tarde de ayer sábado, víspera del día del Corpus, se comienzan a trasportar al suelo los dibujos realizados con anterioridad.

Las alfombras se concluyen poco antes del comienzo de la celebración litúrgica de la catedral. La iconografía que se despliega en las calles, amén de motivos geométricos y vegetales, suele ser de representaciones figuradas de diversa temática y simbología, especialmente eucarística. Las alfombras unen los espacios del recorrido tan solo dejando unos pequeños pasillos de acceso.

Una vez concluida la misa, presidida por el obispo Abilio Martínez, que pronunció una emotiva y elocuente homilía, la procesión salió de la catedral por la puerta de San Miguel. Acompañaban a la custodia con el Santísimo, además del prelado, el Cabildo Catedral y los portadores de cruces, estandartes y palio, niños de la primera comunión, la Corporación municipal, con el alcalde Jesús Alonso al frente, la subdelegada del gobierno, Yolanda de Gregorio, miembros de la Guardia Civil y multitud de fieles y espectadores por todo el trayecto. En el recorrido procesional se adora especialmente al Santísimo en cuatro altares dispuestos frente a la puerta de San Miguel, en la residencia sacerdotal de la plaza de la Catedral, en la Casa Consistorial y en el palacio episcopal.

El alcalde Jesús Alonso destacó el esfuerzo de los más de 400 voluntarios que han hecho posible, un año más, que las calles y plazas por donde ha discurrido la solemne procesión hayan mostrado ese aspecto tan brillante y consiguiendo la justa admiración de vecinos y visitantes, como sentido “homenaje y reconocimiento al Santísimo Sacramento que sale por nuestras calles”. La participación de la población para hacer de este acto algo digno de ver “es un visible ejemplo de la valía, nobleza y buen hacer de los burgenses y oxomenses”, afirmó el alcalde.

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