EUROPEO DE AMSTERDAM Daniel Mateo ha tenido un sonoro estreno como integrante de la selección española absoluta de atletismo en pista. El adnamantino nacido en 1989 ha competido esta tarde en el 10.000, y ha entrado en meta en séptima posición, mejorando su marca en tres segundos hasta dejarla en 28:43.03. Estaba contento en zona mixta, sabedor de que había terminado donde tenía que terminar y de que había intentado hacerlo un poco más arriba, hasta que le adelantó su compatriota Juan Pérez.
Unas imágenes en televisión, sin embargo, revelaban que el soriano había pisado por dentro cuando se encontraba prácticamente solo, entre dos grupos. Ello hacía tener malas vibraciones, y más después de lo que había sucedido minutos antes, realmente en la carrera inmediatamente anterior, la final del 200: la organización ha descalificado al corredor local Churandy Martina, que había ganado, con lo que el oro ha pasado a un español, Bruno Hortelano.
Es cierto que la benevolencia es mayor con las pruebas de larga distancia que con las de velocidad, y que Martina ha pisado al menos tres veces, pero el precedente no era positivo. Efectivamente, Daniel Mateo ha sido descalificado. Como es habitual, la Real Federación Española ha reclamado esta descalificación y, pocos minutos después, ha surtido efecto.
En resumidas cuentas, Daniel Mateo ha terminado séptimo de Europa en una carrera que ha sido más o menos como se esperaba: los turco-africanos Arikan y Kaya han impuesto desde el principio un ritmo infernal, rondando el 2:40 el kilómetro. En estos tramos iniciales, de hecho, daba la sensación de que Mateo permanecía en el grupo con algunos apuros.
Sin embargo, a partir de la tercera vuelta, y ya con los turcos muy distanciados, se ha formado un grupo compacto en el que el deportista soriano siempre se ha mantenido en las últimas posiciones, pero sin sufrimientos... hasta aproximadamente el kilómetro siete y medio.
A partir de ahí, como es lógico en un 10.000, se han empezado a producir movimientos. Daniel Mateo ha tenido instintos de osadía pero también de cabeza. En algunos momentos ha llegado a circular en la sexta posición, por detrás de Toni Abadía entre los españoles y por delante de Pérez hasta que este, como hemos dicho, le ha adelantado. Por delante, Abadía se iba directo a por el bronce, lo que ha supuesto también una inyección de ánimo para Mateo, que lo estaba viendo.
Ese impulso final le ha servido para bajar su marca hasta los citados 28:43.03, lo que le hace irse de Amsterdam satisfecho, conocedor también de que su techo en los 10.000 todavía no es ese.
Pero no lo va a conocer este año. Su intención para lo que queda de temporada es correr el 5.000 en el Campeonato de España de Gijón, el 23 y 24 de julio. Antes, es posible que compita incluso en Soria, en algún control que esta próxima semana se celebra en Los Pajaritos. Será el miércoles, una carrera fundamentalmente para disfrutar y para ayudar a compañeros de todos los días a encontrar los tiempos que buscan.
Sergio Tierno/Amsterdam
