El operativo de control y vigilancia micológica desarrollado por la Junta de Castilla y León, a través de los agentes medioambientales y celadores del Servicio Territorial de Medio Ambiente, en coordinación con la Guardia Civil, especialmente su Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), y con el apoyo de los agentes medioambientales de las entidades propietarias, ha decomisado hasta el momento en esta campaña de otoño, por recolección ilegal, un total de 4.864 kilogramos de setas: 3.619 de boletus, 1.232 de níscalos y 13 kilogramos de otras especies.