LA COMPRA 2015 A pocas horas de que se celebre La Compra (si el cielo lo permite) los doce novillos que aguardan en Valonsadero podrán soportar el festejo, aunque no en las mismas condiciones que lo hicieron en El Lavalenguas. Al agotamiento y las lesiones propias del encierro y de la suelta del pasado sábado, se han sumado las agresiones que sufrieron los animales el domingo y el lunes, que dejaron a los astados en un delicado estado. El ganado se ha recuperado y "ayer y hoy han mejorado muchísimo", ha asegurado Raúl González, de la Asociación de Amigos de La Saca, aunque "no están igual que en El Lavalenguas". Básicamente, a los novillos no se les deja descansar en Cañada Honda. Y por si fuera poco que se les increpe y se les altere para que se levanten y se muevan, los más incívicos (por suerte, una minoría) les lanzaron piedras de considerable tamaño. "Hay que poner soluciones y empezar a pensar en poner vigilancia a los novillos en Valonsadero para que no sucedan estas cosas", ha considerado González.
