Así quedará la plaza Mariano Granados peatonalizada

El proyecto de peatonalización de la plaza Mariano Granados en el centro de la capital soriana transformará este espacio en una zona “accesible” e incluirá una marquesina acristalada que separará la zona para peatones de los carriles del tráfico, además de albergar la oficina de turismo y desempeñar las funciones de parada de autobuses urbanos.

El alcalde de la capital, Carlos Martínez, acompañado por el arquitecto redactor del proyecto de actuación en superficie de Mariano Granados y su entorno, Ignacio Cabrerizo, han presentado la imagen de la nueva plaza, que la próxima semana se llevará a Comisión Informativa de Urbanismo y posteriormente, tras la Semana Santa, al Consejo Sectorial de Urbanismo.

Carlos Martínez ha explicado que esta actuación mantiene la filosofía de todo el proyecto, de “accesibilidad absoluta” al peatón, nuevos espacios para disfrutar en la ciudad y además un ordenamiento de los elementos “con guiños a la plaza original”.

La intervención se concentrará hasta junio en la zona actualmente vallada de Mariano Granados para liberar todo el espacio antes de las fiestas de San Juan, abrir los tres carriles al tráfico y posteriormente se acometerá Calle Caballeros, con banda de rodadura para evitar los problemas en el pavimento, hasta conectar con San Juan de Rabanera, así como la conexión con Alfonso VIII, Jurados de Cuadrilla y El Ferial.

Además, a la altura de las calles Claustrilla y Alberca también se pondrá en valor el paso de la antigua muralla para dar a conocer el límite intramuros de la ciudad.

El alcalde ha recordado que la Plaza de Mariano Granados mantiene el tráfico, pendiente todavía de cerrar (en función del estudio de tráfico encargado a la empresa Doymo) si será unidireccional o bidireccional, con tres carriles junto al antiguo edificio de Caja Duero, uno de los cuales será de servicio como intercambiador de autobús y apeadero de viajeros.

Los taxis proseguirán en la calle Caballeros donde se encuentran actualmente.

El regidor soriano ha explicado que todas las aceras del proyecto estarán “a un mismo nivel con la meta de eliminar cualquier barrera y conseguir la máxima accesibilidad”.

En la línea que separa el espacio de la plaza de estancia, ocio y paseo se colocará una marquesina totalmente transparente que integrará los ascensores y escaleras de los dos núcleos de acceso del parking, la oficina de turismo municipal, hasta ahora en la plaza Ramón y Cajal, y una zona guarecida de las inclemencias meteorológicas, sobre todo pensada en la parada de autobús de cara al invierno.

La marquesina sí mantendrá como elemento uniforme con el Espolón un arco de acero corten.

Este espacio, además, de tener un contenido de servicio y de uso funcional por los viajeros, será también una barrera entre la acera y la calzada para mejorar la seguridad dentro de este proyecto que recupera los metros para los peatones y, por consiguiente, para la dinamización comercial y turística del centro de la ciudad.

Otro aspecto destacado es el referido a las puertas de La Dehesa que cobrarán protagonismo, hasta ahora ocultas por el tráfico, y que tendrán una iluminación led especial que aumentará su visual desde El Collado.

El proyecto se encuentra ahora  en estudio en los servicios técnicos municipales, pasará a Comisión, Consejo de Urbanismo y el objetivo es abordarlo con celeridad para concluir la segunda de las fases, la tercera ya sería en los entornos de Mariano Granados, de cara a San Juan.

El redactor del proyecto, Ignacio Cabrerizo, ha indicado que desde el principio “se tuvo claro que Espolón y Mariano Granados tendrían continuidad, con un único proyecto, pero con dos ideas claramente distintas, aunque con lógicas similitudes que se pueden apreciar en el arco, en los pavimentos o en el mobiliario urbano con alcorques con bancos iluminados, farolas en la línea de las ya colocadas, etcétera”.

El arquitecto ha añadido, además, “algunos guiños a la plaza original” con el pavimento, el tradicional cruce en diagonal y la recuperación de algunos árboles como los plataneros en ciertos puntos y la ubicación en otras zonas, como El Ferial, de ‘prunus’.

Respecto a la marquesina y la zona de tráfico ha puntualizado que “los tres carriles dejan la solución al tráfico abierta e incluso la opción de moldear la decisión en función del uso”.

En esta ocasión, con la marquesina se integrarán escaleras abiertas, ya que la parte cubierta es suficiente para evitar las adversas condiciones meteorológicas y se ha forrado la actuación de vidrio con una oficina de turismo que el visitante encontrará nada más llegar a la ciudad en el apeadero de autobuses o en el parking.

Además, esta misma conexión con el transporte público es “otro camino hacia la sostenibilidad”.

Otro aspecto en el que ha incidido Ignacio Cabrerizo es el de la accesibilidad ya que, por ejemplo, las alturas de los soportales que conectan El Espolón y Mariano Granados quedarán eliminados y el acceso al parking se diluirá como zona peatonal dado el tráfico residual del acceso al mismo, y la señalización con árboles y led.

Por otro lado, en este punto junto al Ferial se mantiene un carril de emergencias que asegurará en caso de necesidad el paso de ambulancias o camiones de bomberos.

El proyecto se incluye dentro del ya ejecutado del paseo del Espolón con una actuación global de 2,6 millones de euros comprometidos por el Ministerio de Fomento en un protocolo suscrito por el Gobierno y el Ayuntamiento de Soria.

De momento, el Consistorio, a la espera del desarrollo del citado convenio, ha adelantado parte del dinero para “aliviar los contratiempos a los vecinos”.

Ahora los técnicos deberán comprobar con el citado proyecto, los materiales y las calidades, y que el mismo se ajusta a la cantidad estipulada.

Simultáneamente, las obras de la zona subterránea prosiguen a “buen ritmo” alcanzando ya la cota cera tras concluir las tres plantas de aparcamiento y se está acometiendo su conexión con el ya finalizado y en uso de El Espolón.