El centro de recepción de visitantes del antiguo Fielato de la capital soriana, junto a los Arcos de San Juan de Duero, acoge desde hoy y hasta el 8 de septiembre una exposición de fotografía de Antonio y Cyntia Pérez, padre e hija unidos por esta afición.
La concejala de Comercio y Turismo, Teresa Valdenebro, ha presentado esta muestra compuesta por 28 imágenes seleccionadas y que mezcla dos visiones, la de los pueblos abandonados de Soria con la firma de Antonio Pérez y la de una capital con rincones por descubrir y luces sorprendentes, que retrata su hija Cynthia.
En este sentido, Valdenebro ha destacado que esta nueva exposición, que toma el relevo de la de Numancia, sigue cumpliendo con el objetivo municipal marcado para este lugar “de ser un centro dinámico en el que van rotando las muestras”.
La concejala ha destacado de la exposición de hoy “que son fotos de calidad que reflejan nuestra Soria en dos vertientes, monumentos conocidos, lugares emblemáticos de la ciudad y también la Soria de los pueblos abandonados, con historia…”.
FOTÓGRAFOS
Cynthia Pérez Pérez es una joven fotógrafa nacida en Soria, que comenzó a interesarse por la fotografía hace varios años, siendo en 2006 cuando inició en la capital soriana el Ciclo de Grado Superior de Fotografía Artística.
Desde entonces compagina el trabajo con la fotografía haciendo pequeños proyectos de todo tipo. Ésta es la primera vez que tiene la ocasión de exponer algunas de sus obras que le permiten, además, “hacer llegar al público una visión diferente de mi ciudad”, según la propia artista.
Por su parte, Antonio Pérez Hernández, natural de Salamanca y afincado hace muchos años en Soria, ofrece en esta exposición una imagen de la Soria de los pueblos, con instantáneas en las que los detalles de madera, piedra o barro sobresalen.
El autor ha confesado que “siempre sentí curiosidad por la fotografía y tras colaborar con el proyecto de fin de ciclo de mi hija Cynthia, fue creciendo mi interés por este maravilloso mundo”.
Este fotógrafo, que también expone por primera vez, ha reconocido que “siempre me han atraído mucho los pueblos abandonados, y eso es lo que quiero compartir. Nunca imaginé que podría mostrar mis trabajo al público”.
