Si alguna vez os habéis encontrado un enlace a algunas de las carreteras más impactantes del mundo, es muy probable que os hayáis encontrado la que acompaña estas líneas.
Está en China, y sirve para unir la bonita población de Shenlongwan con el resto del mundo sin necesidad de dar un rodeo de decenas de kilómetros.
De hecho, este tramo de carretera ganado completamente al acantilado tiene un recorrido no muy largo, de kilómetro y medio. Según aseguran los medios consultados, fueron los propios vecinos los que decidieron romper su aislamiento en 1985 y los que trabajaron durante 15 años hasta conseguir terminar la escénica vía en el año 2000.
Desde entonces, el turismo subió en grandes proporciones hasta el punto de que la aldea pasó a recibir hasta 300.000 visitantes anuales para ver, más que la aldea en sí, la gran obra de ingeniería, así como para sentir el vértigo de conducir por un acantilado cuyo fondo está a cien metros.
Está carretera, situada cerca de la ciudad de Changzhi en la provincia de Shanxi, ha sido noticia en este comienzo de 2022 por el increíble accidente que sufrió un camión el primer día, el 1 de enero.
Siguiendo las indicaciones de su GPS, el conductor empezó a avanzar y avanzar por esta carretera, hasta que se dio cuenta de que no podía pasar por algunos puntos. De hecho, la carretera está limitada a cierta longitud de vehículo, longitud que sobrepasaba el camión con mucho.
Cuando empezó a maniobrar, una de sus ruedas se quedó en el aire. Por suerte, el resto del camión permaneció en la vía y conductor y acompañante pudieron bajar sin resultar heridos.
Las maniobras para retirar el camión duraron tres días, tiempo en el cual los vehículos que quisieran llegar a la aldea tuvieron que dar el rodeo anterior.
Hasta el año 2000, otra manera de llegar a Shenlongwan era a pie, subiendo por estas empinadísimas escaleras:
