Hoy toca reflexión. La gastronomía y la cocina están de moda, no hay más que echar un vistazo a los últimos formatos televisivos, pero lo cierto es que más allá de éxitos catódicos, el sector de la agroalimentación y el turismo gastronómico son un asunto muy a tener en cuenta en los tiempos que vivimos. A saber.
De las pocas cosas que van especialmente bien en este país, es el turismo. Los datos de la 'Marca España' revelan que la gastronomía es el atributo mejor valorado por los turistas que recibe España. Y eso que no se ha cuidado especialmente y muchos lugares siguen intentando colar al foráneo gato por liebre. Afortunadamente, muchos negocios y territorios han comprendido que nuestro verdadero valor, la marca que España vende de verdad es lo bien que se come, se bebe y se disfruta, valores que países como Italia o Francia han sabido 'colocar' desde hace lustros.
El sector de la agroalimentación da trabajo en España a más de dos millones de personas, representa más del 8% del Producto Interior Bruto, supone el mantenimiento de 30.000 empresas y crece a través de la exportación.
Centrados en la restauración, y en Castilla y León, la Comunidad cuenta con 5.285 restaurantes que suponen 468.609 plazas. Según los datos de la Dirección General de Turismo, 7 de cada 10 visitantes a Castilla y León se quedan a comer en un restaurante, y valoran con un 7,8 sobre 10 la satisfacción de la visita, la calidad de la atención y la calidad de la comida. Otros datos que ponen de relevancia la gastronomía de Castilla y León son la importancia de su despensa, con 60 figuras de calidad, un recetario de casi 12.000 recetas, 12 denominaciones de origen en sus vinos, o el hecho de ser la Comunidad con mayor producción micológica del país. ¿Es un asunto serio o no?
Hay muchos ejemplos de territorios que han hecho de la gastronomía una bandera, lo que supone crecimiento y desarrollo, no sólo de restaurantes, sino de lo que lleva consigo: alojamientos turísticos, pequeños productores, empresas transformadoras, etc. O lo que es lo mismo, crecimiento económico y empleo. Castilla y León busca mejorar su posicionamiento como destino gastronómico, no en vano en la región se celebran al año alrededor de 300 eventos gastronómicos de envergadura. Una de las grandes citas de este año será Soria Gastronómica, una referencia en la cocina micológica. La Consejería de Cultura y Turismo ha creado la aplicación para móviles 'CYL Gastronomía' para que se conozcan con detalle todos estos eventos y ha puesto en marcha otras iniciativas para fomentar la región como destino gastronómico. Otras instituciones y empresas deberían intensificar sus acciones con el mismo objetivo.
Y ahora llega Madrid Fusión, un congreso con una enorme repercusión nacional e internacional, un escaparate como muy pocos. Soria estará de nuevo en la gran cita gastronómica, como le corresponde. La Diputación Provincial acierta al dar visibilidad en el evento a las denominaciones de origen y marcas de calidad de la provincia, a las empresas, a la cocina micológica y a la trufa negra de Soria, uno de nuestros tesoros alrededor del cual puede desarrollarse el sector gastronómico y turístico que nos ponga a la altura de territorios como el Perigord francés.
Quizá tarde, aunque más vale que nunca, pero parece que se ha destapado una verdad incuestionable: la auténtica 'Marca España' es la gastronomía. Ojalá sepamos gestionarla, promocionarla y 'venderla' como merece.
