Blog | Periodista y cocinera

Saboreando Soria

IMG_2042 Pepe Rodríguez, ayer en el Aula Magna Tirso de Molina

La de ayer fue una jornada maratoniana, sobre todo para el chef Pepe Rodríguez. El cocinero de Illescas, el 'duro' de Masterchef, desplegó en Soria todas sus dotes de comunicador nato, que las tiene y muchas, y una campachanía con la que cae bien a todo el que le escucha. Con paciencia siguió el programa organizado, departió con todo el mundo y se hizo fotos que hoy inundarán sin duda las redes sociales. Pero en medio del show fue desgranando algunas de sus teorías sobre la cocina y de por dónde pueden ir los tiros en esta materia. Por lo escuchado, no reniega de la cocina tradicional, qué chef podría hacerlo, pero aboga por la mejora, la reflexión, el estudio, la técnica, la vanguardia; y por el mejor producto, venga de donde venga, sin chauvinismos innecesarios. Por eso en Soria no regaló los oídos a la concurrencia que llenaba el Aula Magna Tirso de Molina con lo de que tenemos el mejor torrezno del mundo ni la mejor mantequilla. Eso sí, destacó que son buenos productos con los que hay que trabajar de diversas formas y saber vender.

IMG_1999 Carlos Pescador, Óscar García y Pepe Rodríguez

Segunda reflexión de Pepe Rodríguez: aunque se tengan buenos productos, hay que contar con buenos cocineros si se quiere promocionar la gastronomía de un lugar; esto es, chefs que se lo toman en serio y que buscan con su trabajo el reconocimiento, a ser posible (y esto ya lo añado yo) de la más famosa y estrellada de las guías rojas.

Tercera reflexión: hay que democratizar la alta cocina. El toledano asegura que ha habido una barrera entre las grandes cocinas y el público general, mal llamado 'no entendido'. No hace falta ser un experto, sino tener capacidad de disfrute a la hora de vivir la experiencia de un gran restaurante. En este sentido, también entonó un 'mea culpa' en nombre de los cocineros, que no han sabido hacer llegar ese mensaje a todo mundo y han permitido que la alta cocine asuste. En su restaurante en Illescas, El Bohío, se puede comer un menú de 37 euros, un ejemplo de lo asequible que puede ser un 'Estrella Michelín'.

Pepe Rodríguez aboga por la cocina evolucionada, pero con sello personal, para que no sea igual comer en un sitio u otro. Y también defiende que hay tiempo para todo, para la tradición y para la vanguardia culinaria. "Hay momentos en los que un torrezno frito sabe a gloria y otros en los que prefiero la panceta confitada, bien preparada, como la hace Óscar (García Marina) en su restaurante Baluarte. Lo importante es disfrutar". Esa parece ser su máxima, especialmente en este momento de su vida en el que está viviendo las mieles del éxito televisivo. Es un apasionado de la cocina, pero reconoce que la fama que le ha dado Masterchef le ha permitido llenar su restaurante y hacer otras muchas cosas, además de estar todo el día trabajando en los fogones.

Por lo demás, la jornada celebrada ayer en el Aula Magna Tirso de Molina, organizada por la Diputación Provincial de Soria en colaboración con la Cámara de Comercio, sirvió sobre todo para evidenciar que las instituciones están por la labor de promocionar la gastronomía, de darle un empujón a Saborea Soria, una plataforma que aglutina a casi 300 empresas que tiene muchas líneas de actuación posibles. Será difícil, sin embargo, que la promoción sea integral, porque el sector está muy ocupado intentando sobrevivir y cada empresa mira por lo suyo. Pero lo cierto es que extender aún más la idea de que en Soria se come bien beneficiaría a todos. La mini feria de productos que ayer se celebró acompañó bien la jornada, pero no logró el objetivo de contactar con distribuidores, que era lo esperado. Habrá que seguir estudiando fórmulas para lograrlo.

IMG_2008 Torreznos fritos por Carlos Pescador, de Santo Domingo II

Pepe habló y habló, pero al final cocinó. Preparó unas evolucionadas patatas con costillas, una falsa trufa de carne en caldo de cocido y una sopa de tomate con anchoas y mantequilla (de Soria). Contó con un ayudante de lujo, uno de los cocineros con más proyección fuera Soria, Óscar García Marina, de Baluarte. El chef soriano, amigo personal del de Illescas, dio el contrapunto a los torreznos bien fritos por Carlos Pescador, de Santo Domingo II. Su plato fue de panceta soriana, pero confitada, desgrasada y acompañada de hongos y cebolla con naranja. Además preparó uno de los platos del  menú de boletus de este año de su restaurante, un canelón de carne de cordero con hongos y reducción de vino.

IMG_2054 Pepe Rodríguez y Óscar García Marina

La jornada se remató con una degustación en los jardines del Aula Magna a cargo de los alumnos de la Escuela de Hostelería de Soria con los productos cedidos por las empresas, en la que hubo tradición y vanguardia, pero sobre todo, buen hacer.

Y así terminó un día que comenzó con un paseo de Pepe Rodríguez por Soria degustando algunas de las tapas micológicas que estos días se sirven en los bares y restaurantes de la capital. Dejó el buen poso de las figuras mediáticas con carisma, pero también temas para la reflexión, especialmente para los que han de tirar del carro de la promoción gastronómica en Soria.

IMG_2036 Falsa trufa de carne en caldo de cocido

IMG_2067 Crema de tomate con anchoas y mantequilla