Fotos: Concha Ortega
En La Riba de Escalote, en el cerro Melero, se encuentra la atalaya del mismo nombre: la Torre Melero. Es una construcción singular ya que es de las pocas torres vigía que aún conserva parte de las almenas. Por otra parte, a la estructura cilíndrica principal se le adosa un pequeño torreón circular que alberga en su interior un espacio cuadrangular que podría ser un aljibe. Para acceder a él se construyó posteriormente una rampa con escaleras.
Destaca además un elemento islámico: la puerta de acceso. Es una puerta doble, con arco de herradura en el exterior y en el interior un arco rebajado más bajo.
La torre está construida con piedra caliza trabada con mortero de cal. Tiene una altura de diez metros en tres alturas y está coronada por almenas.
Esta torre de comunicación fue construida en el siglo X durante el Califato para reforzar las líneas de defensa musulmanas frente al avance castellano.
Desde este punto y junto con las atalayas del Tiñón y la Ojaraca se vigilaba el curso del río Escalote. Desde allí se divisa un imponente y agreste paisaje que por sí solo merece la pena el viaje.