Diego Barranco, el cantarero que se atrevió con todo

En Sheffield, en una de sus dos presencias internacionales y su última gran competición

El deporte en Soria vive hoy de nuevo una jornada tristísima de luto por el fallecimiento de Diego Barranco Gómez (15-9-1992). Una larga enfermedad ha terminado con la vida de uno de los mejores atletas que ha dado la provincia en los últimos años. Después de probarse en varias disciplinas, encontró la suya: todas. La creación del CAEP de un grupo de combinadas permitió que Barranco se codeara con los mejores de España en esta especialidad, en la que también llegó a ser internacional. La enfermedad le obligó a retirarse prematuramente y, hoy, ha vestido de nuevo a Soria de tristeza.

Diego Barranco no empezó en el atletismo de niño. Con su hermana melliza Miriam, iniciada poco antes que él, se adentró en este deporte en el año 2007. Su planta y su potencia le encaminaron primero a la velocidad con vallas. Ya en 2009, todavía en edad juvenil, obtuvo las marcas mínimas para competir en el Campeonato de España de su categoría: quinto en la semifinal del 60 vallas en Oviedo en pista y séptimo en la semifinal de 110 al aire libre, en Motril (Granada).

En 2010 empezó su andadura en la especialidad donde obtuvo sus mejores logros: las combinadas. Su primer Campeonato de España en esta prueba de pruebas fue en marzo de ese año, en San Sebastián. Barranco, junior de primer año, fue sexto. Fue espectador de lujo del récord del mundo que batió Eusebio Cáceres, 'transformado' después en uno de los mejores saltadores de longitud del mundo. Aquella cita inaugural no hacía presagiar el espectacular rendimiento posterior del deportista. La anterior frase no es del todo cierta: seguro que su entrenador Enrique Márquez y sus compañeros de entrenamiento sí sabían con lo que trabajaban.

Debut en decatlón

Ese mismo año hizo sus dos primeros decatlones: 5.752 puntos para proclamarse campeón autonómico junior en Valladolid y 6.179 para conseguir la plata en el Campeonato de España de esa categoría en Castellón, a 200 puntos del oro de Jorge Suárez. Ya empezaba a estar claro que había atleta y bueno en la persona de Diego Barranco.

En 2011, todavía junior, volvió a obtener mejores resultados al aire libre que en pista. Bajo techo fue sexto en el Campeonato de España de Sabadell, y al aire libre cambió la plata del año anterior por el bronce a pesar de mejorar sustancialmente su puntuación hasta 6.419. Su exhibición en el 1.500 final de Játiva le sirvió para quedarse a 39 puntos del oro de José Luis López y a 22 de la plata de Vicente Guardiola.

En 2012, cambio de categoría, a promesa, a competir contra deportistas dos años mayores que él. Fue un año de adaptación a los cambios, con diferentes alturas de vallas y diferentes pesos en los artefactos. Siendo de los 'pequeños', sumó dos cuartos puestos en los dos Campeonatos de España: el de Antequera en pista cubierta y el de Toledo al aire libre, donde hizo 6.194 puntos.

El gran salto de 2013

La progresión mostrada en 2012 parecía haberse ralentizado en lo que a marcas se refiere... pero entonces llegó 2013. Solo había que verle según avanzaban los meses para comprender que ya se había hecho un atleta importante, algo de lo que él también empezó a darse cuenta según se acercaba el verano. En invierno fue cuarto en el Campeonato de España en pista en San Sebastián, rompiendo la barrera de los 5.000 puntos por 33.

Pero su explosión definitiva llegó meses después gracias al duro trabajo: campeón de España promesa en Mataró aventajando en más de 200 puntos a Vicente Guardiola y superando por primera vez los 7.000 puntos (7.081). En estas semanas de intensa competición, Barranco fue superando todas sus mejores marcas salvo en 1.500, 110 vallas y altura.

En ese campeonato de Mataró fue tercero otro soriano, Daniel Arancón. Un mes después, en Alcobendas, Arancón y Barranco protagonizaron una de las escenas más hermosas del atletismo soriano. Fue en el 1.500 del Campeonato de España Absoluto, la última prueba del decatlón. En la última vuelta, los dos jovencísimos sorianos se destacan de todos los demás. Ya solos en cabeza, se van esperando mutuamente para entrar juntos y victoriosos en meta, de la mano.

Diego Barranco fue cuarto de la general, un resultado que directamente le incrustaba en la élite española de este deporte cuando todavía no había cumplido los 21 años. Ya no era ilusorio emocionarse con las futuras gestas que el deportista de Quintana Redonda iba a brindar al deporte soriano. La Federación de Castilla y León le concedió el premio de mejor atleta del año de la Comunidad en categoría promesa.

Su viaje a Sheffield

El siguiente invierno confirmó esas grandes expectativas. Barranco, que ya se había estrenado como internacional en enero de 2013 en Valencia, volvió a ser llamado por la Real Federación Española de Atletismo para formar parte del equipo Sub 23 del encuentro internacional de Sheffield (Reino Unido). Allí hizo su mejor marca de siempre en heptatlón, 5.205 puntos, pero no era una marca 'verdadera'. En tierras británicas solo consiguió su mejor registro del año en peso y en el 1.000.

En sus piernas, en sus brazos, en todos sus músculos y en sus cientos de horas de trabajo había espacio para mucho más. Pero fue entonces cuando apareció el cáncer contra el que tanto ha luchado en estos dos años el joven cantarero. Ya no hubo más competiciones de primer nivel atlético para Barranco, pero siempre estaba donde olía a deporte. En atletismo, por supuesto, pero también en otros dos deportes a los que amaba: el voleibol y el fútbol, su Quintana Redonda. Deja huérfanos y tristes a todos los que tuvieron el placer y el honor de conocerle. Ahora se encontrará con un amigo de Quintana para el que siempre ha tenido palabras cariñosas de recuerdo, y con él se pasará las horas hablando de fútbol, del monte y del pueblo.

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