Le conocí en Zaragoza, pasamos horas hablando de arte, fotografía, compartimos conocimientos y al final me habló de sus orígenes maños-sorianos y que había vivido durante muchos años en Barcelona y de la fuerte vinculación que sentía por Soria. Repasamos campos de Castilla y comenzó a imaginar…
Decidió apartarse de la ciudad, cansado de su ritmo, necesitaba sentir la quietud que es su base inspiradora y comenzar una nueva etapa de creación en Soria.
Como si nunca hubiese vivido en la ciudad se adaptó perfectamente al tranquilo paso de las horas, al campo, al frío y a la deshabitada ciudad.
La obra fotográfica de Marcos Clavero Llorente busca el dialogo con el observador, la crítica, la ruptura con lo establecido para provocar y sugerir, sus obras nos hacen pensar en un trasfondo, en un porqué, en algunos casos encontraremos la respuesta en otros nos invadirá una sensación inquietante pero nunca nos dejaran indiferentes.
Por donde pasa explosiona su entorno, llevándole a crear imágenes con un orden exacto que busca lo maravilloso de lo anormal, una sensación fuera del aparente desorden del mundo, para que escape de nuevo a lo conocido con una sutileza lenta y pausada en una reformulación de la imagen basada en hacer real lo irreal, en un binomio que empuja a replantearse la propia realidad.
De personalidad inquieta, en constante búsqueda creativa de la imagen poética, mediante el escenario correcto, el cual contenga la esencia para relatar la historia adecuada. A medida que avanza su persona también lo hace su obra.
Después de vivir algunos meses en Soria, incluido el invierno y no escucharlo todavía decir -que frío-. Puedo afirmar que ha encontrado su lugar inspirador en las anchas tierras de Castilla, en los pueblos y en los días soleados. En las pequeñas cosas que nos rodean, de las cuales los Sorianos estamos acostumbrados y volvemos a apreciarlas con los "aires nuevos".
Berta Soria, interiorista y diseñadora textil
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